Cada vez que inicia un año nos planteamos cambios y propósitos, no todos se podrán cumplir pero todos estarán disponibles.
Hacer la lista de deseos del año para muchas personas es un ritual y a veces la frustración llega al finalizar el primer mes porque no hay avances. Eso es parte de la vida de los seres humanos planificar y realizar.
Un pequeño detalle que casi nunca tomamos en cuenta es que cada cosa llega en el momento que debe, ni antes ni después. Por esto es muy importante encontrar las respuestas en cada instante, no pretender adelantarnos a lo que pueda ocurrir.
Eso sí pronunciar con nuestros labios lo que queremos que se convierta en realidad con agradecimiento infinito es clave para que nuestros sueños lleguen y se concreten.